Cada vez son más los profesionales con años de experiencia que deciden volver a las aulas, no por necesidad inmediata, sino por una clara convicción: seguir creciendo y mantenerse relevantes en un mercado laboral que no deja de transformarse. En Bequers acompañamos a muchos de ellos y entendemos de primera mano las razones que les impulsan a dar este paso.
Adaptarse a un entorno laboral en constante cambio
El ritmo de cambio actual no tiene precedentes. La digitalización, la automatización y la inteligencia artificial están redefiniendo profesiones, herramientas y competencias en todos los sectores.
Según la Digital Skills & Jobs Platform (2024), en España el 66,2 % de la población cuenta con competencias digitales básicas, pero aún existe un déficit importante de especialistas en tecnologías de la información: un 4,4 % frente al 4,8 % de media en la Unión Europea.
Este dato muestra que, aunque la sociedad avanza en digitalización, sigue siendo necesario adquirir nuevas habilidades para no quedarse atrás.
En Bequers lo vemos a diario: ingenieros que quieren dominar la gestión digital, profesionales de marketing que buscan especializarse en analítica de datos o directivos que desean incorporar estrategias tecnológicas en sus decisiones. La actualización constante ya no es una opción, sino una ventaja competitiva.
Aumentar la empleabilidad y las oportunidades
El reciclaje profesional, también conocido como reskilling o upskilling, se ha convertido en una prioridad tanto para los trabajadores como para las empresas. De hecho, un estudio realizado por la firma EY y el Future for Work Institute señala que el 61 % de las empresas españolas considera el reciclaje profesional de sus empleados una prioridad estratégica.
Esta tendencia confirma que la formación continua ya no es solo un deseo individual, sino una necesidad organizacional para mantener la competitividad en entornos cambiantes. En un mercado donde los perfiles más demandados evolucionan con rapidez, formarse permite mantener la empleabilidad, acceder a nuevos puestos o incluso cambiar de sector.
Reorientar la carrera y descubrir nuevas pasiones
Otra razón poderosa para volver a estudiar es el deseo de cambio. Hay profesionales que, tras años de dedicación, sienten la necesidad de explorar un nuevo ámbito, cambiar de sector o incluso emprender. En Bequers hemos visto cómo una nueva formación puede actuar como catalizador para ese cambio: abre la mente, renueva la motivación y ofrece una perspectiva más amplia sobre el propio potencial.
A menudo, este tipo de decisión no se toma por obligación, sino por vocación. La formación se convierte entonces en una oportunidad para reinventarse y redescubrir lo que uno quiere hacer profesionalmente.
Formarse con sentido: programas adaptados al profesional
Uno de los mayores retos para quien decide volver a estudiar es compatibilizarlo con su vida laboral y personal. Por eso, la clave está en elegir una formación flexible y adaptada a las necesidades de profesionales en activo.
En Bequers nos especializamos precisamente en eso: asesoramos a quienes quieren seguir formándose, ayudándoles a elegir programas de máster, posgrados o especializaciones que realmente se ajusten a su perfil, objetivos y ritmo de vida con las mejores condiciones económicas y de financiación porque la formación adecuada no debe ser una carga, sino una palanca para avanzar.
Invertir en uno mismo: el valor del crecimiento personal
Más allá de los motivos laborales, volver a estudiar es también una apuesta por uno mismo. Representa una actitud proactiva ante la vida profesional y una muestra de curiosidad, resiliencia y deseo de superación.
Muchos de los profesionales que han pasado por Bequers coinciden en algo: volver a estudiar les ha devuelto la ilusión, la seguridad y la confianza en su propio potencial.